Jardín de Flores que brotan de la mar. Vergel de belleza sin par, que hacen despierto soñar. El corazón de los guanches, el murmullo de la brisa.
Desde la cumbre bravía, hasta el mar que nos abraza. No hay tierra ni raza como la mia. Siete estrellas brillan en el mar y el pico Teide de guardián, que palpitan al mismo compás.